Mi novela

CAPÍTULO 1- La vida no es lo que  cres

Era un jueves, de invierno. Hacia frío y no petecia salir de la cama, estava calentita, me levanté gracias a mi maravilloso y a la vez odioso despertador. Fui corriendo a dar un gran beso a mí madre, que ya se tenía que ir a trabajar. Ese día no es que me encontrasa al 100X100, pero no le dí inportancia y no le dije nada, porque sino no me dejaria ir al instituto, y ese día tocaba prueba de patinaje. Sí és mi gran afición y no puedo dejar de perseguir mi sueño.
Al ver el reloj, dejé de pensar, y me puse corriendo a almorzar y hacer la rutina de la mañana.
Salí de casa, y vi a los de bachillerato pasando en frente de mi casa. Yo cómo no había otro remdeio tube que ir con ellos. Hasta que tube la oportunidad de canbiar de acera.
Allí en la plazoleta donde siempre quedabamos, ya había gente. Era la última me dío un poco de corte, pero s eme pasó rapido.
Vi que había un chico nuevo en el grupo. Nos lo presentaron y tal. No era un chico fuera de lo normal.
Cuando íba a acercarme apra decirle cómo me llamo y esas cosas, él saltó y dijo:
-  Hola Miranda, cómo estás?
Yo me quedé en estado xoc, al ver que sabía cómo me llamaba, entonces dijé:
-Muy bien, cómo sabes mi nombre?
-Me lo han dicho, has tardado tanto-dijo él.
-A, bueno nos suelo tardar tanto lo que pasa...-dije yo, él me interrumpio.
-No hace falta que me sueltes, explicaicones, siempre pasa algo. A y me llamo Jonathan.-Dijo él entre risilla y risilla.
- A bueno, es la costumbre y que bonito nombre.-dijé yo con una sonrisina pillina.
En ese momento, me palpitava mucho el corazón pero no sabía porque.
-Venga tortolitos vamonos, que llegamos tarde!-Soltaron los demás.
Eramos sólo 2 chicas en aquel grupo, formado por 6 personas, que nos conociamos desde que teníamos 3 años.
Nosotros riendenos, íbamos detrás, pero sentía cómo una cosilla, que no m dejava hablar con él.
Llegamos, y yo ya me fuí con los demás que vivían en la parte de arriba.
Entramos en el instituto, cón carcajadas y sonrisas igual que cuándo salíamos.
Cuándo acabaron las clases, me fui corriendo a hacer la prueba de patinaje, no se lo conté a nadie porque sí no vendrían y me pondría más nerviosa, y no tenía mcuhas ganas. Era inportante, era para ver, sí entrava en competición o no. Una amiga mía también lo íba a hacer, y expresavamos nuestra nerviosidad, hablando una a la otra.
Fue cuando ví a Jonathan. PERO QUE HACÍA ÉL AQUÍ!
Sandra. mi compi nos dejó solos, soltando una frase:
-Tranquilos ya os dejo solitos, apra que ahbléis de cosas de novios.
Yo que le íba a arrancar los pelos, me giré y en tono de enfadada solté:
-Que haces aquí! Cómo sabías que íba a hacer esta prueba. Ya te puedes ir marchando proque me pondré nerviosa y será peor!
-Pero si yo solo, venía a verte a ver cómo la hacías pero ya me voi.Tranquila -DIJO ÉL.
Hice la prueba y pensandfo en loq ue le dijé, sabía que sentía algo por él. Porque en aquel momento quería que me apoyara.
Me caí, pero me fuí corriendo a salvar nuestra amistad.
-ESPERA! No te vayas por favor, siento lo de antes, pero esque no sabía loq ue sentía por tí...
El giro la cabeza y me dijo:


CONTINUARÁ....